Su ermita es compartida por varios municipios en la celebración de su romería, entre ellos el municipio de Nogueras, desde el cuál sus vecinos ascienden tanto andando por el sendero de la montaña o bien en coche. Un frondoso bosque de pinos y encinas cubre las laderas del monte.
Desde el mirador de las Sierras Ibéricas puede divisarse el Valle del Jiloca, Sierra Menera, el cerro de San Ginés y la sierra de Cucalón.
La ermita se erigió en el año 1504, en el lugar donde según la tradición se apareció la Virgen en una carrasca al carbonero Martín.
Las construcciones del santuario que se conservan actualmente fueron realizadas en los siglos XVII y XVIII.
La vista panorámica que se divisa es extraordinaria, en días claros se ven los Pirineos.